Weekend en familia... glup!

A pedido de una de mis seguidoras aquí estoy rescatando del baul de mi nostalgia alguna historia con pimienta blanca que pueda definir un poco más de mi y quienes me rodean con otro enfoque (omitiré las partes de "pimienta negra").

Mi padre había terminado de construir una casa en la bahía, se suponía que todo estaría listo para pasar un fin de semana acomodando nuestras cosas y fotos y empezar a escoger algunos muebles. Por ello decidimos hospedarnos en el shore para festejar el cumpleaños de mi padre, hacer las compras y recibir algunos amigos.
En principio llegamos al aeropuerto en diferentes vuelos, el hotel estaba precioso, habían inaugurado un nuevo restaurant y si bien adoro el Victor siempre los cambios me han seducido y me parecia que estaba genial la eleccion.
Mi madre siempre seguidora del cuidado personal había pensado en que compartiéramos una tarde "madre-hija" y había reservado un día de spa. Yo ni lo sabía y lo unico que pensaba era en llamar a aquella muchacha cubana que suele depilarme de "urgencia" cuando estoy allí. Ella emplea un sistema que yo ya había probado en londres y realmente no te hacía doler. Pero el "calendario" de mi madre tenía todo estipluado y por ello no me daba tiempo a llamar a Rachel.
Fuimos al spa, el aroma era delicioso y realmente me daban ganas de mimarme un poco.
Me toco el turno de exfoliacion y me encontré con un guapísimo joven y en lo unico que pense era en no clavarle los vellos de mis piernas!
Al encontrarme con mi madre lo primero que atinó a decirme fue un sermon de aquellos... "no puedo creer como llegaste a ello! que no estes de novia no significa que debas dejarte así las piernas! Mi madre siempre me ha dicho (como seguramente a todas uds) que siembre debes tener la ropa interior combinada y la depilación como el día UNO.
El punto es que ni una cosa ni la otra, yo allí estaba dandole como pocas veces la razón...
Llegó el día del cumpleaños y en una de las pequeñas suites-pool llenas de camastros y velas nos sirvieron la cena.
Muchos amigos estaban allí esa noche y parecia realmente una velada mágica. La comida deliciosa y los apple martini la especialidad de la casa. Llegó el momento del brindis y luego de filmar mensajes, beber, comer y sumergirnos a la piscina decidimos una salida grupal improvisada. El manager del hotel inmediatamente se encargo de todo y luego de estar de marcha terminamos aprendiendo salsa, bailando musica house progressive con mis padres y amigas ademas de algun que otro tema de ricky martin y shakira.
No se como regrese al hotel, nadie lo supo, bebimos demasiado, mis padres incluidos. A la mañana siguiente tocaron bien temprano a nuestra puerta, todos aparentemente habiamos "apagado' el telefono de la habitacion y estabamos hiper dormidos. Nos digeron que nos venian a buscar y mencionaban a mi padre, yo pense que evidentemente no habia tenido mejor idea que contratar un crucero por el dia (es oceano-adicto) y como era su cumpleaños y rara vez estabamos todos juntos accedimos a prepararnos rapidamente y bajar al lobby para complacerlo.
Nos llevaron a un barco, mi padre sonreia de oreja a oreja y mi madre muy feliz por el dia que habia tocado y porque no le solicitaban que se sacara sus cuñas.
Llegamos a bahamas luego de 4 horas, a esas alturas la resaca nos aniquilaba a todos, los anteojos negros eran nuestros aliados y el silencio empezó a protagonizar el trayecto.
Bajamos y mientras mi madre se sumergio, compro y bebio varios litros de café yo me acomodé a dormir una apacible siesta con mi hermano mayor y su prometida.
Luego de otras 4 horas y almuerzo silencioso de por medio y un hermoso speech de mi padre agradeciendo lo lindo que era tenernos a todos reunidos llego el momento de regresar... sus ultimas palabras fueron "gracias por organizar este viaje sorpresa, realmente hubiera dormido todo el dia, ya no estoy para estas fiestas interminables, pero me parecio una muy buena idea!, a quien se le ocurrio?"....
todos en silencio esperabamos que mama dijera algo, uno de mis hermanos, un amigo... ALGUIEN! ... el resultado fue que le dije a mi padre... "papa, pensamos que lo habias organizado tu"
Todos empezamos a reir, le preguntamos al guía y nos mostró el papel donde estaba la firma de mi padre y de uno de sus amigos, con nuestros nombres y otras cosas. Resultado? El viaje lo habia contratado mi padre en su borrachera en aquel bar para turistas en south beach! ni él ni su amigo lo recordaban!! empezamos a reirnos a carcajadas y resulto que no solo lo habia contratado sino que habia brindado su tarjeta de credito y el traslado hacia el mismo desde el hotel. Aun dice que no sabe en que momento sucedio.
Aquellas 12 horas fueron unas de las pocas que hemos pasado ininterrumpidamente todos juntos, aun conservo la foto del crucero con una gorra nautica y un salvavidas en la mano, definitivamente fue un muy buen regalo que no se nos habia ocurrido a ninguno de nosotros y el mejor regalo para mi fue hacerlo todos juntos en familia.